Alberto Contador en Google Maps


No le conozco personalmente, pero tengo varios compañeros que sí le conocen y me han dicho que es un tipo bastante sencillo y buena gente.  Así que, ahora que acaba de ganar su segundo Tour de Francia, aquí pongo una noticia que es posible que ni siquiera él mismo sepa: que fue cazado por el coche mapeador de Google. 😎

¿Quieres comprobarlo? Pues pincha AQUÍ y verás a Alberto dando un paseíto en bici por Pinto, su pueblo.  Ésta es una captura desde Google Maps. (Editado: ya no se le ve, han cambiado las vistas.  Menos mal que hice la captura de arriba 🙄 )

(clic para ampliar)

(clic para ampliar)

Una lástima que no se ponga el casco, podría ser un buen ejemplo para los chavales del pueblo.  En fin, parece que este chico estaba señalado para ser famoso ¿no?

Me cago en Google


Pues estaba yo tratando de hacer una entrada sesuda, reflexionando cómo es posible que desde el Ministerio de Sanidad y Consumo se recomiende no viajar a México pero, sin embargo, no digan nada de no viajar a los Estados Unidos de América AUNQUE EN EL MOMENTO DE ESCRIBIR ESTA ENTRADA EE.UU. TIENE EL 54% DE LOS CASOS MUNDIALES, MIENTRAS MÉXICO SÓLO TIENE EL 34,64% DE ESOS CASOSAquí los datos que yo manejo.

Cobardes.

Pero no somos los únicos cobardes (aunque eso no sea alivio).  Alemania, por ejemplo, no tiene problemas en recomendar a sus compatriotas no viajar a España, no sea que se contagien.  Y eso que España sólo representa el 2,02% de los casos totales.  ¿Acaso recomienda no viajar a EE.UU?  Repito: cobardes.

Estaba, digo, pensando en la cobardía que tienen los países cuando tratan de «no enfadar» a los poderosos y en hacer este mensaje cuando estaba buscando una imagen en Google que ilustrase el tema.  Y no se me ocurrió otra cosa que buscar la palabra «gorrinitos» entre las imágenes de Google.  ¿Qué encontré? Pues que en la primera página de resultados, salimos los cuatro pringaos que hacemos este blog.  Ahí va la captura…

Hala, los cuatro ahí retratados. :(

Hala, los cuatro ahí retratados. Clic para ampliar 😦

Lo dicho: me cago en Google. emoticono-matar-matar-matar

Navegando a la deriva por la red


Gracias al azar, uno encuentra fotos impagables como la de este perrito.

Gracias al azar, uno encuentra fotos impagables como la de este perrito.

Recuerdo cuando internet se empezó a popularizar en España.  ¡Qué tiempos aquellos! Abundaban los mega-portales que tenían de todo: horóscopos, predicciones meteorológicas, consultorios sentimentales, los éxitos musicales, secciones eróticas, chats…  era un batiburrillo cibernético en el que, pese a tener miles de servicios en la misma página,  paradójicamente era muy difícil encontrar algo.

Con ese caos, empezaron a popularizarse los buscadores.  Pero no se separaban de esos grandes portales multi-servicios, sino que se integraba como otro servicio más.  Es decir, Yahoo ofrecía mil servicios, entre ellos un buscador.

Poco después Google pegaba un puñetazo en la mesa y decía «yo soy el buscador, apartaos todos, pardillos«.

Sigue leyendo

El «Más» de Google


Este fin de semana pasado, mientras hablaba con unos amigos y con soletegordo, me sorprendió mucho darme cuenta de que yo era el único que conocía la existencia de Google Calendar.

Les estuve explicando que pueden usar ese servicio web para llevar una agenda de sus tareas de forma «on-line» y, por lo tanto, puede ser consultada desde cualquier ordenador o dispositivo (Blackberry, PDA, Wii…) que tenga acceso a internet.  Se quedaron aún más sorprendidos cuando les añadí que puedes recibir en el teléfono móvil los avisos que hubieses programado antes.

¿Nunca te fijaste en la opción "Más"? (Clic para ampliar)

¿Nunca te fijaste en la opción "Más"? (clic para ampliar)

¿Tan extraño era eso? Sinceramente, yo creí que todo el mundo lo sabía.  Pero visto que no es así, pues voy a explicar cómo hacer que Google te mande un mensaje a tu móvil para que no se te olvide, por ejemplo, un cumpleaños.

Sigue leyendo

Un buen sitio para trabajar


Para un empresario, la prioridad fundamental siempre ha sido maximizar el beneficio ¿no es así? Microsoft, y por tanto Bill Gates, ha debido ser el paradigma del empresario modelo durante muchos años, aunque ahora esté de capa caída (y yo que me alegro jejeje).

Para un trabajador, en concreto para un informático, trabajar para Microsoft podría ser algo muy deseable hace 10 ó 15 años, pero hoy las cosas también han cambiado.  Si se preguntase a un ingeniero informático cuál sería su lugar favorito para trabajar, creo que muchos responderían «Google».  Y no sólo los ingenieros, teniendo en cuenta el ambiente que se observaba en este artículo del diario «El Mundo» o esta colección de fotos.

Por eso no debe ser extraño que Google esté en el primer puesto elaborado por la CNN mientras que Microsoft esté en el puesto nº50, según su lista.

A pesar de todo, sigo sin fiarme de Google.  Espero que ser tan «guays» y estar en boca de todos no les haga convertirse en el Señor Oscuro de los gigantes empresariales del siglo XXI.  El tiempo pondrá a cada uno en su sitio…

Lo que sí tengo claro es que me dan muchísima envidia los cacharritos para echar la siesta de las oficinas de Google.  Aquí hay uno de ellos:

Quiero uno asi para mi trabajo.  Y si no es posible, ¡para mi casa!

Quiero uno así para mi trabajo. Y si no es posible, ¡para mi casa!

El nuevo navegador de Google: Google Chrome


El bombazo ha llegado y Google ha liberado su navegador, Google Chrome.

A base de ideas muy sencillas (que suelen ser las mejores) creo que van a conseguir revolucionar completamente el panorama de la navegación por internet.

Todavía no tienen versión para Linux, pero pienso probarla en cuanto la tengan.  Creo que este navegador supondrá un antes y un después en varios conceptos como seguridad, estabilidad, confidencialidad… vamos, que me pongo nervioso sólo con pensarlo.

El caso es que hay un cómic que te explica las novedades de Google Chrome… pero está en inglés.  Para solucionar eso, lo he traducido y lo he integrado en los mismos archivos JPG, que están disponibles si sigues leyendo esta entrada. 😀

Sigue leyendo