Todos tenemos alguna virtud. Seguro que esta chica es una eminencia en lo suyo. 😉
En otra entrada que hice hace tiempo ya escribí sobre alguna gente extraordinaria que nos rodea. Por eso el título de la entrada de hoy: a veces podemos apreciar y valorar (muchas veces, sobrevalorar) las habilidades de algunas personas que jamás hemos conocido y que nunca conoceremos en persona, pero vergonzosamente pasamos por alto a otras personas mucho más cercanas que, quizá, afrontan retos mucho mayores que nuestros supuestos «ídolos». Quizá la hipermetropía vecinal nos impide verlos y apreciarlos, por tenerlos demasiado cerca.
Pues hoy quiero hablar de una de esas personas: el compositor, maestro de ceremonias, futuro superdeportista de récord Guinness, mi vecino Héctor.
Sigue leyendo →